lunes, 13 de diciembre de 2021

Maki, la guerrera Morena en Tamaulipas.


Reynosa, Tamaulipas 13 de diciembre de 2021. 

No es monedita de oro para caerle bien a todo mundo, pero no se puede negar que, la doctora MAKI ORTIZ DOMÍNGUEZ, es de las pocas figuras que se mantiene en pie, a pesar del devenir del tiempo y los embates que ha sufrido en las parcelas políticas de la entidad. En un terreno “dominado” por los hombres, como es la política, MAKI ha sabido jugar, y bien, para ganar, posicionando su nombre en dos marcas políticas importantes en la entidad: el Partido Acción Nacional (PAN) y, ahora, el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena). Es —también de admirarse—, que dentro de Morena ya ocupa un lugar importante en la búsqueda por la candidatura a la Gubernatura, a pesar de tener poco tiempo de simpatizar con las siglas guindas, lo que habla de dos cosas importantes de ella: (1) Le entiende muy bien a la política y su espinoso juego, como pocas damas, y… (2) Goza de una estructura personal que le ha permitido posicionarse por encima de importantes cuadros dentro de Morena como ERASMO GONZÁLEZ ROBLEDO, OLGA SOSA RUIZ, CARMEN LILIA CANTUROSAS VILLARREAL y EDNA RIVERA LÓPEZ, lo que de entrada significa mucho. MAKI ORTIZ DOMÍNGUEZ, es una guerrera en todos los rubros. No es una dama improvisada, ni mucho menos del montón y, hoy por hoy, de acuerdo a su talacha en la cosa pública, es considerada la mejor (mujer) política de Tamaulipas. ¿Por qué es una guerrera…? Porque contra todo pronóstico superó el gran reto de recuperar la salud propia, cuando por culpa de un infarto cerebral perdió la movilidad de la parte izquierda de su cuerpo y la visión; a pesar de ello, hoy está perfilada como una de las favoritas para llevarse la candidatura de Morena a la gubernatura. ¿Por qué se puede decir que no es una dama improvisada…? Porque ha sido Diputada federal en la Legislatura 59; Senadora de la República en la Legislatura 62; y Alcaldesa de Reynosa durante cinco años, tras conseguir la reelección en el 2018. Es decir, la dama no acaba de “abrir los ojos” en la política, ni siquiera es una “adolescente”; es un “peso pesado” que lleva camino recorrido, lo que la convierte —repito— en una de las pocas mujeres tamaulipecas triunfadoras en un terreno predominantemente de varones. ¿Por qué es considerada (hoy) la mejor (mujer) política de la entidad…? Porque resistió la brutal presión, los profundos ataques de la cúpula de su propio partido, a través del Congreso del Estado y su propio Cabildo, consiguiendo una reelección. MAKI ORTIZ DOMÍGUEZ hizo historia al ser la primera mujer en ocupar la Alcaldía de Reynosa y la primera en reelegirse; lo anterior no se puede borrar, aunque se cierre los ojos o se voltee la mirada. Además, contra todo pronóstico, en toda la historia de Tamaulipas, MAKI es la primera en lograr, en una sucesión, colocar a su hijo, CARLOS PEÑA ORTIZ, como alcalde, abanderando un partido distinto al PAN, al venir de Morena. Es decir: (1) Consigue su reelección en Reynosa, una tierra considerada la nueva capital política de Tamaulipas, contra fuertes “vientos” que soplaban en su época y… (2) Consigue una sucesión dejando a su heredero al mando, como Alcalde, precisamente en la cuna del poderoso “Grupo Reynosa”, con todo lo que eso signifique… Por todo lo anterior y por la estructura bien aceitada que opera a su favor al interior de Morena, MAKI ORTIZ DOMÍNGUEZ es considerada como una de las favoritas para llevarse la candidatura a la gubernatura. Tras darse a conocer la lista oficial de siete (y no seis) aspirantes de Morena a la gubernatura, en donde fueron incluidos tres varones más y ninguna otra dama, el partido dio el mensaje claro del respeto que le tiene a la capacidad de MAKI ORTIZ, quien no goza de “padrinos” como OLGA SOSA RUIZ, para acomodarla en la lista, sino que está allí por méritos propios y por lo que representa.

De los resultados como Alcaldesa, sobre los kilómetros pavimentados, las luminarias instaladas, las despensas entregadas, los drenajes reparados y más datos duros, tal vez hablaremos en otras colaboraciones. 

Autor: Manuel Buendía.